La cotización del oro y la plata continúa su ascenso este viernes, día festivo en gran parte de Europa. Este incremento ha sido impulsado por las compras realizadas por bancos centrales, las tensiones geopolíticas y la expectativa de nuevas reducciones en las tasas de interés en Estados Unidos. Estos factores han debilitado al dólar frente a otras monedas importantes, lo que a su vez ha estimulado la demanda de metales preciosos y materias primas básicas.
El oro ha alcanzado un valor de 1.800,50 dólares la onza, mientras que la plata se sitúa en 22,75 dólares por onza. Este aumento en los precios se suma a la tendencia alcista que vienen experimentando en las últimas semanas.
La incertidumbre en torno a la economía global, provocada por la pandemia de COVID-19 y sus efectos en la recuperación económica, ha llevado a los inversores a refugiarse en activos considerados seguros como el oro y la plata. Además, las tensiones políticas y comerciales entre distintos países también han contribuido a esta subida en los precios de los metales preciosos.
En este contexto, se espera que la demanda de oro y plata siga en aumento en los próximos meses, especialmente si se confirma una nueva disminución en las tasas de interés por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos. Esto podría mantener la presión alcista sobre los precios de estos activos, atrayendo a más inversores en busca de protección y rentabilidad en un entorno económico incierto.
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